En el año de 1984, tuve la oportunidad de comprar un automóvil Chevrolet Corvette convertible C3 1969, propiedad de un amigo. Meses más tarde me surge la idea de construir un automóvil tipo mecánica nacional como se le conoce en España y en México, similar a los que en EE.UU. se les conoce como Street Road, pero en este caso se aproxima más al concepto de un Race Road. Después de retirar la carrocería del chasis, empecé a jugar con varias ideas: una de ellas fue ponerle una carrocería de Volvo 544 –Sedán dos puertas-; otra fue colocarle una carrocería de DKW 1000 –Hard-top dos puertas-; finalmente, opté por adaptarle una carrocería Alfa Romeo Giuletta Ti -Sedán de cuatro puertas-. Los tres autos son de principios y mediados de los años 50’, para mantener una idea del automovilismo deportivo que tanto me atrajo durante mi niñez, adolescencia y juventud. Finalmente decidí utilizar la última carrocería por considerarla la más adecuada, ello por sus características, su presencia deportiva y su prestigio de competencia. Recordando la tradición de carreras de la marca Alfa Romeo (Yo los vi competir en múltiples eventos. Una de ellas fue la última Carrera Panamericana en 1954, la cual apenas recuerdo y otras carreras importantes en México como: como el circuito los fuertes en Puebla; en el autódromo de la ciudad de México; la carrera México-Puebla, de 1962, la cual fue ganada por un piloto poblano amigo mío Javier De Velasco, a bordo de un Alfa Romeo Giulietta T.I Y otras más, durante los años 50’s y 60’s) decidí utilizar el Alfa Romeo, por tener un frente y una cola agradables, aspecto deportivo y bien proporcionados. Además, siendo este un automóvil sedan, tiene un espacio mayor que un automóvil deportivo por sí mismo y así poder recibir la mecánica Corvette. Para poder utilizar dicha carrocería se tuvieron que hacer muchas modificaciones: una de ellas fue convertir el sedán de cuatro puertas a dos puertas, para así poder mover el habitáculo hacia la parte anterior y generar un espacio conveniente para poder darle cabida al motor del Chevrolet Corvette convertible C3 de 5.7 Litros. Para mantener la armonía y la estética del diseño hubo que reducir la altura del habitáculo en 8 cm recortando los pilares B, reduciendo la altura total del auto. En esta modificación pudimos ver que la distancia entre ejes del Corvette y la Giulietta Ti son casi iguales, entonces lo que se le cortó del habitáculo se le tuvo que añadir al frente y un poco más debido al diámetro de las llantas que son mayores las del Corvette que las del Alfa Romeo. En el aspecto mecánico se mantuvo intacto el chasis del Corvette con todos los puntos de fijación de la suspensión de la transmisión y motor. Lo único que se cortaron fueron los dos extremos del chasis, para poder acoplar la carrocería y así mantener un largo casi igual a la Giulietta original. El radiador fue hecho especialmente para poderlo acomodar en el espacio según la necesidad. El tanque de gasolina se construye de aluminio y se instala en la cajuela con una capacidad de 82 litros aproximadamente, utilizando una bomba eléctrica de baja presión. El habitáculo se redujo por el cambio de Sedán de cuatro a dos puertas y al bajar la altura total en 8 cm. Al convertirse la Giulietta en dos plazas más una, se utilizan dos asientos de marca Recaro de piel color gris que hacen una buena combinación con el azul helvético (azul rey) de la marca Alfa Romeo, de esos años y el tablero pintado del mismo azul. Al haber un pequeño espacio detrás de los asientos se colocó una batería de doce voltios para repartir el peso equilibradamente y tener un buen resultado con el centro de gravedad. Se utilizan instrumentos marca v.d.o.: velocímetro, tacómetro, medidor de gasolina, presión de aceite, temperatura de agua, amperímetro y tres luces piloto: presión de aceite, direccionales y luz alta. Es importante señalar que los conceptos, los diseños y los materiales empleados para su elaboración corresponden a la época de 1955 a 1970. Aunque este automóvil es único por la mezcla de los componentes europeos con americanos, siempre me he guiado por las modas, estilos y la forma de construcción de los autos deportivos de esos años. Todo esto se inició en agosto de 1987 con la compra del Alfa Romeo Giulietta T.I. en un deshuesadero de un buen amigo y eso evitó que el auto fuera echado al fierro viejo para ser reciclado; salvándolo de su destrucción para darle una segunda oportunidad de vivir. http://pepemomoxpan.blogspot.mx/2011/08/proyecto-alfa-romeo.htmlContinuer la lecture:Précédent1955 Buick, voiture de patrouille routièreSuivant |